Codo de tenista
La epicondilitis o codo de tenista se produce por el desgaste e inflamación de los tendones que unen los músculos del antebrazo en la parte externa del codo y que intervienen en la extensión de la muñeca y de los dedos.
Esta lesión se produce habitualmente por el sobreuso de estos músculos en deportes de raqueta como el tenis, padel y squash. Esto provoca dolor y sensibilidad a la presión en la parte externa del codo.
¿Qué es la tendinitis?
La tendinitis es la degeneración de la inserción de los músculos en los huesos. La estructura que permite esta unión se llama tendón, el sobreuso de los músculos condiciona un desgaste continuo que conlleva el deterioro de este tendón. Su desarrollo es lento y puede llevar a roturas parciales o totales del tendón por lo que es importante actuar lo antes posible sobre los factores que conllevan el deterioro. El dolor aparece poco a poco y empeora con el paso del tiempo.
¿Qué siento en mi codo cuando tengo epicondilitis?
Los síntomas suelen aparecer gradualmente. En la mayoría de los casos, el dolor es leve y empeora lentamente con el paso de las semanas. Es un dolor o ardor que aparece en la parte externa del codo, condiciona una disminución de la fuerza en el agarre y se aumenta a la presión en el punto de inserción en el codo y aumenta con algunos movimientos del brazo como son el apretón de manos, conducir y el uso de una raqueta entre otros.
¿Tratamiento de la epicondilitis ?
El tratamiento de este tipo de situación debe ser global de tal manera que consiga:
1-Detectar los factores que conllevan la sobrecarga del tendón con el fin de conseguir que disminuyan o se eviten (en esta fase la biomecanica y el preparador físico serán fundamentales)
2-Valorar si la lesión es exclusivamente una tendinopatía, si existe rotura y de que tipo es Esto permitirá seleccionar el mejor tratamiento.
3-Establecer las pautas de recuperación que ayuden a reforzar los músculos encargados de proteger el área.
La medicina del dolor permitirá diagnosticar este tipo de problemas y junto con la ayuda de otros especialistas como traumatólogos, rehabilitadores, fisioterapeutas y podólogos entre otros podrán ayudarle a mejorar este tipo de patología y dolor.